viernes, 11 de diciembre de 2009

La primera mitzvá de la Torá es:




ויברך אתם אלקים ויאמר להם אלקים פרו ורבו ומלאו את הארץ

(בראשית א' כ"ח)

Y el Señor los bendijo, diciéndoles: “Sean fructíferos y multiplíquense y llenen la tierra”.

(Génesis 1:28)

ואתם פרו ורבו שרצו בארץ ורבו בה

(בראשית ט' ז')

Y serán fructíferos y se multiplicarán; proliférense en la tierra y abunden en ella.

(Génesis 9:7)



El Jinuj escribe:



משרשי מצוה זו כדי שיהיה העולם מיושב שהשם ברוך הוא חפץ בישובו כדכתיב לא תהו בראה לשבת צרה והיא מצוה גדולה שבסבתה מתקימות כל המצות בעולם כי לבני האדם נתנו ולא למלאכי השרת ונוהגת בכל מקום ובכל זמן וכו' והמבטלה בטל עשה וענשו גדול מאד שמראה בעצמו שאינו רוצה להשלים חפץ השם לישב עולמו

(ספר החינוך א')

La esencia de esa mitzvá es la de asegurar que el mundo esté habitado. HASHEM desea que el mundo se asiente, como está dicho: “El mundo ha sido creado para ser habitado”. Esta gran mitzvá lleva al cumplimiento de todas las mitzvot del mundo, ya que le fue dada a los seres humanos y no a los ángeles. Se aplica en todo momento y en todo lugar. Aquel que le haga falta esta mitzvá está negando un precepto de realización (mitzvat asé) y su castigo es grande porque demuestra que no quiere cumplir con la intención de HASHEM de poblar el mundo.

(Séfer Hajinuj 1)



La mitzvá de multiplicarse es una mitzvá central que lleva a la realización de muchas otras mitzvot, y equivalen a todas los 613 preceptos de la Torá.



¿Por qué casarse?



Dijeron nuestros sabios:



כל אדם שאין לו אשה שרוי בלא שמחה בלא ברכה בלא טובה וכו' בלא תורה בלא שלום. כל אדם שאין לו אשה אינו אדם

(יבמות ס"ב)

Cualquier hombre sin mujer no tiene felicidad, ni bendición, ni bien, ni Torá, ni paz. No es un hombre.

(Talmud Yebamot 62)



Explicaron nuestros sabios sobre el versículo que dice:



בעירום ובחסר כל

(דברים כ"ח מ"ח)

“Sin nada y despojado de todo”

(Deuteronomio 28:48)



אמר רבי אמי אמר רב בלא נר ובלא שולחן רב חסדא אמר בלא אשה רב ששת אמר בלא שמש רב נחמן אמר בלא דעה

(נדרים מ"א)

Dijo Rabbí Ami que dijo Rab “Sin vela ni mesa”. Rav Jisdá dijo “Sin esposa”. Rav Sheshet dijo “Sin un sirviente”. Rav Najmán dijo “Sin sabiduría”.

(Talmud Nedarim 41)



Obligación Personal



1 – Todo varón debe casarse con el fin de reproducirse. Esta obligación recae en principio sobre el hombre, las mujeres no recibieron la orden de casarse. Una mujer, no obstante, recibe recompensa por ayudar al hombre a realizar su obligación. Cualquiera que rehúse cumplir con esta mitzvá es visto como si hubiera derramado sangre, porque disminuye la imagen Divina, causando que la Presencia Divina desaparezca de la nación de Israel. Cualquier hombre que esté sin esposa no tiene bendición, ni Torá y ni siquiera es considerado persona. Mas aun dicen nuestros sabios cuando una persona se casa, sus pecados son perdonados. (Even HaÉzer 1.1)



Hay varias razones por las que las mujeres no están ordenadas a reproducirse. Y éstas son:



דרכיה דרכי נועם

(משלי ג')

Los senderos de la Torá son agradables

(Proverbios 3)



• Ya que todos los senderos de la Torá son agradables, como dice el versículo arriba, cuando una mujer se casa está subyugada a su esposo y también está subyugada a las dificultades involucradas con el embarazo, el parto y la crianza de los niños, cosas que no siempre es agradable, como dice el versículo:



בעצב תלדי בנים

(בראשית ג' ט"ז)

Engendrarás con aflicción

(Génesis 3:16)



בשעה שכורעת לילד קופצת ונשבעת שלא תזקק לבעלה

(נדה ל"א)

“Al momento de dar a luz ella jura que nunca más volverá a concebir”

(Talmud Niddá 31)



• La mayoría de las mujeres arriesgan sus vidas al traer bebés al mundo, y la Torá no la obligaría a exponerse a tal peligro. Su sufrimiento es tal que nuestros sabios dicen que ella jura que no volverá a traer niños al mundo.



פרו ורבו ומלאו את הארץ וכבשוה האיש דרכו לכבוש ואין דרך האשה לכבוש

(יבמות ס"ה)

“Sean fructíferos y multiplíquense y llenen la tierra” Al hombre le compete conquistar, no a la mujer.

(Talmud Yebamot 65)



• Al hombre le corresponde buscar esposa. Es más fácil que él tome la iniciativa. Él es que se compromete a la difícil tarea de sustentar a su esposa, mientras que, si ella es muy pobre y no tan atractiva, tiene menos probabilidad de poder realizar esa mitzvá. Como dicen nuestros sabios:



יותר ממה שהאיש רוצה לישא אשה רוצה להינשא

(כתובות פ"ו)

La mujer desea casarse más que lo que el hombre desea casarse.

(Talmud Ketubot 86)



Por lo tanto, la Torá no ordena a las mujeres que se casen.

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