Al despertarse a la mañana, debe decirse:
Gracias te doy, Oh Rey Eterno, que me has devuelto el alma con misericordia; inmensa es tu fidelidad.
Después de lavar las manos, debe decirse:
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste la ablución de las manos.
Toda vez que hará sus necesidades, lavará las manos y deberá decir:
Al ponerse el Talit katán (Tzitzit), debe decirse:
Al ponerse el Talit gadol, debe decirse:
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste envolvernos con los tzitzit.
Se pone los Tefilín shel yad (filacteria de mano) y antes de atar la Retzuá, debe decirse:
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste ponernos las filacterias.
Shemá Israel
En forma de meditación silenciosa se dice:
Bendito Sea el Nombre Glorioso de Su Reino para toda la eternidad.
Luego se continúa:
Modé (mujeres: Modá) aní lefaneja Mélej jai vekaiam shehejezarta bi nishmatí behemlá; Rabá emunateja.
Gracias te doy, Oh Rey Eterno, que me has devuelto el alma con misericordia; inmensa es tu fidelidad.
Después de lavar las manos, debe decirse:
Baruj atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al netilat iadaim.
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste la ablución de las manos.
Toda vez que hará sus necesidades, lavará las manos y deberá decir:
Baruj atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher iatzar et haadam bejojmá, ubará vo nekavim nekavim, jalulim jalulim, galul veiadúa lifné kisé kevodeja sheim isatem ejad mehem o im ipateaj ejad mehem, i efshar lehitkaiem afilu shaá ejat, Baruj atá A-do-nai, rofé kol basar umaflí laasot.
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que has creado al hombre con sabiduría y formaste en su organismo vías y conductos. Revelado y sabido es ante el trono de tu gloria que si un sólo órgano abierto quedara obstruido o uno cerrado quedara abierto, no sería posible existir ante tu presencia ni una sola hora. Bendito eres, Oh Señor, que curas a toda criatura y haces maravillas.
Al ponerse el Talit katán (Tzitzit), debe decirse:
Baruj atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al mitzvat tzitzit.
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste el precepto de los tzitzit.
Al ponerse el Talit gadol, debe decirse:
Baruj atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu lehitatef betzitzit.
Se pone los Tefilín shel yad (filacteria de mano) y antes de atar la Retzuá, debe decirse:
Baruj atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu lehaniyaj tefilín.
Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste ponernos las filacterias.
Shemá Israel
SHEMÁ ISRAEL A-DO-NAI, E-LO-HE-NU, A-DO-NAI EJAD.
ESCUCHA ISRAEL, EL SEÑOR NUESTRO DI-S, ADONAI ES UNICO.
En forma de meditación silenciosa se dice:
Baruj Shem kevod Maljutó Leolam vaed.
Bendito Sea el Nombre Glorioso de Su Reino para toda la eternidad.
Luego se continúa:
Veahavtá et A-do-nai Eloheja, bejol levavejá uvejol nafshejá uvejol meodéja. Vehaiu hadevarim haéle, asher anojí metsavejá haiom al levavéja. Veshinantam levaneja vedibartá bam, beshivtejá beveteja, uvelejtejá vadérej uveshojbejá uvecuméja. Ukeshartam leót al iadéja vehaiú letotafot ben enéja. Ujetavtam al mezuzot betéja uvish´aréja.
Amarás, pues al Señor Di-s tuyo con todo tu corazón, con toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estos mandamientos, que yo te doy en el día de hoy, estarán estampados en tu corazón; los enseñarás a tus hijos, y en ellos meditarás sentado en tu casa y andando de viaje, y al acostarte, y al levantarte; y los has de traer para memoria ligados en tu mano y pendientes en la frente ante tus ojos, y escribirlos has en el dintel y puertas de tu casa.